Hoy en día el marketing digital es una actividad casi obligada en los negocios para poder sobrevivir y responder de forma adecuada a los retos que impone el nuevo entorno online en el cual nos vemos sumergidos. En Nébula, entendemos este concepto como el conjunto de acciones y herramientas realizadas en el entorno digital y destinadas a lograr los objetivos que una marca se haya propuesto en cuanto a posicionamiento, visibilidad y retorno. En este sentido, aconsejamos realizar el trabajo en tres etapas. La primera implica, precisamente, marcar los objetivos de forma clara. La segunda es la de marcar las estrategias de marketing que tenemos que seguir para obtener resultados. La tercera y última pasa por marcar las acciones, dentro de las cuales siempre tenemos que incorporar un sitio propio de alto impacto: una web vendedora, capaz de aglutinar esfuerzos y facilitar un buen ROI.
Webs que activan ventas
Uno de los retos que supone el entorno digital es el hecho de enfrentarse a un grupo de personas convertidas en consumidores activos. Son hombres y mujeres que ahora tienen mucha información, la manejan antes de tomar decisiones y la comparten después de su compra para que otros puedan hacer lo mismo. En el otro lado se sitúan unas empresas que, además de pensar en cómo diferenciarse de la competencia, deben llamar la atención del consumidor, seducirlo y, en un proceso más emocional que objetivo, lograr su amor: solo de ese modo el buyer persona acabará eligiendo esta opción y no la que representan los competidores. En este contexto, la web corporativa se convierte en el corazón de las estrategias de marketing. Y es que cuando una web está al servicio de una estrategia y con la mirada puesta en los objetivos finales, será capaz de mucho: podrá atraer visitas y hacer pedagogía, acompañar al cliente, mostrarle detalles y ofrecerle información técnica en primera instancia, convirtiendo al visitante en un lead cualificado. Solo así, más adelante, será capaz de activar ventas. Y aún hay más, porque incluso será capaz de fidelizar a los clientes.
Pero, como queda claro, será fundamental que una web se haya diseñado conceptualmente al servicio de las estrategias de marketing que operan en una empresa.
Alinea tu web con tu relato de marcay despreocúpate de la competencia
Estrategias ganadoras
A continuación, vamos a señalar algunas de las estrategias de marketing que pueden incorporarse a diferentes proyectos y que pueden ser muy útiles en solitario o combinadas, dependiendo de los objetivos marcados en cada caso.
‘Inbound marketing’
Actualmente es una de las mejores estrategias cuando el producto o servicio tiene un coste de medio a elevado. Consiste en consolidar un canal propio para captar clientes. Se les atrae creando contenido de calidad que resulte relevante porque les cubre una necesidad o les genera interés y se le invita a seguir con la marca con materiales de mayor importancia cada vez. La idea es acompañar a cada persona hasta que la relación madure y se convierta en cliente.
‘Remarketing’
Es una estrategia que consiste en llegar a usuarios (habitualmente con publicidad de pago) que, de un modo u otro, ya han mostrado interés por nosotros, guiándolos hacía el punto final donde deben realizar la compra.
Atención al cliente
Sí, nosotros consideramos que esta es una de las estrategias de marketing más valiosas que podemos utilizar. Después de todo, es mucho más rentable cuidar a los viejos clientes que buscar otros nuevos. Y aquí es crucial reconocer cómo el entorno online puede ayudarnos a dar un buen servicio a nuestros consumidores.