Los valores intangibles aportan un enorme valor a las compañías de ahí que uno de los grandes desafíos de los fabricantes sea el de saltar del producto a la marca.
Un ejemplo de ello lo tienes en la compañía estadounidense Apple que, con un valor en intangibles que supera el 82 %, es la empresa con mayor prosperidad del mundo. Esto se repite en otras empresas del sector tecnológico como Google (con un 76 % de su valor en intangibles) y Microsoft (con un 85 % de su valor).
Como ya decía el escritor Antoine de Saint-Exupéry en su obra maestra El Principito: “lo esencial es invisible a los ojos”. Nada define mejor el valor de los intangibles dentro de una compañía como esta cita literaria. A pesar del peso que tiene en el éxito empresarial, son pocas las mediciones que se hacen de dichos valores.
Estos son los principales intangibles de una empresa
– El valor de marca. La marca es el sello distintivo de una empresa, lo que la diferencia del resto de compañías, lo que hace que los consumidores escojan un determinado producto antes que otro. Es la imagen propia de la organización, lo que la define en un universo repleto de competidores.
– El conocimiento. Lo que permite que las personas lleven a cabo su trabajo de una determinada manera; la manera en que la empresa consigue obtener buenos resultados y seguir creciendo en un entorno lleno de desafíos.
– Los procesos. Los procedimientos, la metodología y la organización del trabajo, entre otros aspectos, que permiten desarrollar el producto o servicio de una determinada manera y de forma exitosa.
Como ves, las empresas son mucho más que un producto o servicio, son un conjunto de intangibles que se engloban bajo una marca identificativa. El éxito radica en poder gestionar dichos intangibles para lograr un impacto clave en los resultados.
